¡Oh Jesús!

¡Oh Jesús!,

Te reconozco por Rey Universal. Todo cuanto ha sido hecho Tú lo has creado. Ejerce sobre mí todos tus derechos. Renuevo las promesas de mi bautismo, renunciando a satanás, a sus seducciones y a sus obras; y prometo vivir como buen cristiano. Muy especialmente me comprometo a procurar, según mis medios, el triunfo de los derechos de Dios y de tu Iglesia. Divino Corazón de Jesús, te ofrezco mis pobres obras para conseguir que todos los corazones reconozcan tu sagrada realeza, y para que así se establezca en todo el mundo el Reino de tu Paz.

Amen.

jueves, 17 de enero de 2013

La Ultima Cima. Un homenaje a los hombres que llamamos "Sacerdotes"


La Última Cima (Vida de D. Pablo Domínguez Prieto)QDDG

Ejemplo de ser humano, si fuésemos un poquito parecidos a él, haríamos un mundo mejor.  


No hay comentarios:

Publicar un comentario